Sólo tiene 17 años. Y para mayor gloria del profeta Mahoma, estos "soldados del Islam" le han destrozado la vida.

A las cuatro de la mañana, cuando regresaba a casa acompañada de su prima, dos marroquíes (me muerdo la lengua y no escribo la denominación que a mí y a ustedes nos viene a la mente) la asaltaron. La manosearon con sus sucias manos musulmanas. La penetraron bestialmente con sus asquerosos miembros musulmanes. Cumplieron con su deber de someter a una infiel... Y se esfumaron.

Afortunadamente si algo funciona en este país es la Guardia Civil que, pocas horas después, detenía a uno de estos cerdos violadores, un marroquí de 25 años que se escondía en La Unión y que ya ha pasado a disposición de los juzgados de Alicante.

Todo hace pensar que, siendo musulmán como es, será puesto en libertad de manera inmediata. Y le seguiremos  pagando una ayuda social. Y seguirá gozando de asistencia sanitaria.

Tenemos más que motivos para sospechar su inmediata puesta en libertad; los jueces ¡cobardes como pocos! "se la cogen con papel de fumar" cuando el detenido es un musulmán. Parece que lo primero que se aprende a las oposiciones a judicaturas es que "con el Islam, valentías las justas".

Precisamente nuestro periódico asociado, La Tribuna de Cartagena, mientras el resto de mdios callan, ha venido denunciado hasta la saciedad a la denominada "Manada de Alá" que ha violado en reiteradas ocsaiones a menores y que los jueces dejan campando por las calles de Alicante... hasta que un día algún musulmán viole a la hija de un magistrado. Tal vez entonces cambien las cosas...

Esta es la triste historia de una violación de la que nadie hablará.

La vida de una niña de 17 años rota para siempre por obra y gracia de dos soldados de Alá.

Y España entera, cómplice, calla...

Para mayor gloria del profeta Mahoma, una niña española queda marcada de por vida