La Guardia Civil ha detenido a un pedofilo argentino de 44 años en Churriana por estos hechos, que ya ha ingresado en prisión, y al que se le investiga si tiene más víctimas
Contactaron por redes sociales (facebook) y la acosó hasta que consumó una violación para la que tuvo que hacer casi 500 kilómetros. Es la distancia que separa Churriana (Málaga), donde vivía el presunto agresor, y Torrevieja (Alicante), lugar de residencia de su víctima. La Guardia Civil detuvo a un varón argentino de 44 años en la localidad malagueña por el delito de agresión sexual. El Juzgado de Instrucción 2 de Alhaurín de la Torre, que se ha hecho cargo del caso, lo ha enviado a prisión investigado por violar anal y vaginalmente a una niña de 13 años a la que conoció por internet y amenazó durante un tiempo, hasta que sació sus negros deseos sexuales en un macabro viaje.
El sudaca pedofilo captó a la pequeña por facebook donde mentía en su edad al exponer que tenía 50 años. Según relató la niña a la Guardia Civil, en un principio, estableció contacto «tan sólo para hablar». Pero con el tiempo se ganó la confianza de la menor y comenzó a pedirle que le mandara fotografías en las que le «mostrara su lado más atractivo». Llegados a este punto, el violador le sugirió que «fuera un poco más allá», pero la niña se negó.
Esto hizo que el pederasta descubriera sus verdaderas intenciones. Según los investigadores, se aprovechó de la «vulnerabilidad e inocencia» propia de una niña de tan sólo 13 años para amenazarla con publicar las fotos que ya tenía de ella en las redes sociales. Llegó a intimidarla diciendo que la violaría si no se plegaba a sus intenciones. Así, a finales del pasado mes de junio, este ser ruin y miserable acudió desde Churriana hasta un centro comercial cercano a Torrevieja, para cumplir con sus chantajes.
Cuando estuvo allí, llamó a la niña y le insistió en que, si no se personaba en el centro comercial donde se hallaba, publicaría sus fotografías. La niña «temerosa» acudió a la cita. El violador se la llevó en autobús hasta un apartamento que había alquilado expresamente para ese día y allí, violarla anal y vaginalmente en repetidas ocasiones. Al acabar, la dejó abandonada en el piso y regresó a Churriana.
La menor,salio del apartamento aturdida y desnuda de cintura para abajo y pidió ayuda en un bar cercano al lugar donde ocurrieron los hechos para poder llegar hasta su casa. Ya en su domicilio, contó a su madre lo que había ocurrido y juntas acudieron a la Guardia Civil de Torrevieja para denunciar la violación, siendo en ese momento atendidas por agentes especializados en temas relacionados con menores.
Una vez recabados todos los datos, componentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil, se encargaron del caso e iniciaron las investigaciones pertinentes, ante la complejidad que entrañaba tratar de identificar a un individuo que no residía en la zona. Los únicos datos que se aportaban sobre el presunto agresor era que vivía en la provincia de Málaga y que supuestamente tenía unos 50 años.
Tras dos semanas de indagaciones y análisis de los hechos ocurridos, estos agentes ya supieron con certeza la identidad y domicilio del presunto autor de esta agresión sexual. Agentes de la Guardia Civil de la localidad alicantina, apoyados por miembros del Cuerpo en Alhaurín de la Torre, se trasladaron hasta Churriana (Málaga) para proceder a su detención y al registro domiciliario.
En su vivienda encontraron indicios suficientes para constatar que este hombre estuvo en Torrevieja el mismo día de los hechos. También se incautaron dos teléfonos móviles, que están siendo analizados, por si el sujeto hubiera podido cometer más delitos de este tipo.
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